Nueva renuncia en el Gobierno: se va un funcionario clave del INDEC

El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) atraviesa una nueva sacudida con la renuncia de Guillermo Manzano, director de Estadísticas de Condiciones de Vida. El funcionario presentó su dimisión y se alejará formalmente en los primeros días de septiembre, justo cuando el organismo discute la implementación del nuevo Índice de Precios al Consumidor (IPC) con ponderaciones actualizadas.

Los motivos de la renuncia
De manera oficial, el INDEC atribuyó la salida a “diferencias de criterio y de gestión de equipos”, aclarando que los motivos son personales y que no guardan relación con la producción estadística.

Sin embargo, trascendió que la renuncia habría estado precedida por un fuerte cruce con el titular del organismo, Marco Lavagna, que incluyó un intercambio de insultos. La chispa se habría encendido tras el resultado de una encuesta sobre condiciones financieras que no conformó a la conducción.

“Esto no tiene nada que ver con las nuevas canastas de pobreza”, señalaron fuentes internas, desmintiendo versiones que vinculaban la renuncia con ese proceso clave.

Un cargo estratégico en la medición social
La dirección que encabezaba Manzano tiene un rol central, ya que de allí dependen las estadísticas de pobreza, empleo y condiciones de vida, insumos fundamentales para el diseño de políticas públicas y para el debate económico.

El funcionario había ingresado al organismo durante la gestión de Jorge Todesca bajo el gobierno de Mauricio Macri y logró sostenerse tanto en la administración del Frente de Todos como en la actual gestión libertaria, que decidió ratificar a Lavagna al frente del instituto.

Un cambio en un momento sensible
La salida se produce en un contexto complejo: mientras la inflación mantiene registros elevados —los precios mayoristas crecieron 2,8% en julio y acumulan una suba interanual del 20,9%—, el INDEC trabaja en actualizar las ponderaciones del IPC, herramienta clave para medir la variación de precios al consumidor.

La renuncia de Manzano abre un nuevo interrogante sobre la estabilidad interna del organismo y genera incertidumbre sobre la continuidad de los proyectos técnicos en marcha.